miércoles, 19 de agosto de 2009

Una flor.


En todo el tiempo que estuvimos juntas en ningún momento te envíé una flor. Ahora, quizá tarde, te mando esta con la esperanza puesta en que un día pueda reconquistarte.
Sé que es absurdo que sea yo, que fuí la que te dejó, la que hoy quiera recuperar tu amor.
¿ Es eso posible ?. ¿ O aquella tarde cuando te dejé frente a tu casa tras haberte dicho que no podía seguir contigo, se cerró de golpe tu corazón para mí como cerraste la puerta de mi coche?.
Llevo días, semanas intentando hacerte ver que todo fue un error, que no sé ni cómo pensé que ya no te quería cuando en absoluto lo sentía.
¿ Recuerdas que te dije que si alguna vez tenía otra novia querría que fueras tú ?.
¿ Cómo interpretaste entonces esa estúpida contradicción?.
Ahí me delató el subconsciente , seguro, pero yo no supe verlo en ese momento.
En todo el tiempo que estuvimos juntas, ninguna vez te envíé una flor. Por eso hoy, con la tristeza de tantos detalles pasados por alto, quiero que aceptes esta rosa.
Mi idea era comprarla roja para que expresara todo el amor y la pasión que nunca ha desaparecido en mí. Pero sé que tú la, prefieres blanca, asi que esta de tu color favorito imagina que su color original era intensamente rojo y que quedó así por todas las lágrimas que derramé en ella llorando tu ausencia.

2 comentarios:

noviembres dijo...

Pues, no es por ná, pero desde el rojo al blanco que tiene, mare mía, cuántas lágrimas, no? eso sí, se ha quedao más blanca que la nieve, preciosa la rosa, y aún así, dicen que nadie merece tanto dolor, ni tanto sufrimiento. Dicen que la vida es un suspiro y que no podemos seguir llorado por las esquinas. Nos dicen que no, que a hacer puñetas y a vivir, que son dos días.

alasdemariposa dijo...

Yo siempre lo digo que el amor cuando se va, debería irse a la par por ambas partes,. Todo sería más fácil.