viernes, 21 de junio de 2019


Acaso el tiempo no tenga más razón
que ser eterno,
y nosotros transeúntes en él,
con las sensaciones térmicas
que vamos padeciendo,
lo gozamos o lo perdemos.

Prendidas del tiempo,
las cosas son o no fueron.

El tiempo da calor o frío,
corre o vuela...
o se detiene al borde de un precipicio
y cuando quiere volver a empezar
es el fin del inicio.

A veces cuando de frente miramos al tiempo,
o desde un espacio que ya parece infinito,
nos interpela cualquier hora
o cualquier minuto,
marcándolo a destiempo.
Es la con o sin razón de los sentidos,
que pretende anhelar,
o prever quizás,
esa ocasión oportuna
de querer llegar (a tiempo).

¿Y qué hacer si nos falta,
o nos sobra tiempo
si deámbulamos por esa dimensión física,
sin el menor acierto,
cuando detener (o avanzar) agujas,
no engaña ni al más distraído
de los Febreros?.

Yo no creo que sirva cruzar los dedos,
mientras se nos conjuga el yo espero
(que)...





martes, 18 de junio de 2019


sábado, 15 de junio de 2019

La poesía es del color de sus ojos cuando me mira o no. Y yo tildo en mayúscula sus labios si me sonríen o no.


Promesa: Te lo llenaré de versos.
Condición : Que vengas a inspirarlos.

martes, 11 de junio de 2019


Y ¿dónde la busco?.
Si abro un verso para decirla
y se me desmaya en la ausencia
de una boca que era mía.
Si abro un libro y hay un nombre
que se pierde en el agujero negro
de un universo infinito.
Si abro la ventana y la primavera pasa
(de largo),
presurosa, equivocada de esquina,
carente de corazones atravesados por una flecha.
Si abro las manos y como agua
gotea el olvido de pretéritos perfectos
que no he sostenido.
Si abro la boca y no me presta
la voz para llamarla,
y no hay canción para espantar la soledad
que tiñe de tristeza las ilustres canciones de amor.
Si abro los ojos y tropiezo en la oscuridad
de unos días cansados
que se cierran a la luz del sol
y de una luna menguante de razones
para iluminar las calles vacías del corazón.