sábado, 29 de agosto de 2009

De Serrat.


Bienaventurados los que aman porque tienen a su alcance más de un cincuenta por ciento de un gran romance.

Mi Amor es de otro Amor.

Andrea presintió aquella mañana que allí estaba el límite, cuando abrazada a Sofía le había dicho que la amaba más que a nada ni nadie en este mundo y Sofía con los ojos brillantes de lágrimas le había dicho que la quería mucho.
Ella no quería que la quisiera mucho. Sus sentimientos desbocados por aquella mujer pedían a gritos y en silencio mucho más que un cariño de amistad.
Andrea presintió aquella mañana que allí concluía su acometimiento hacia un corazón que lamentablemente amaba a su vez a otro corazón que no era el suyo.
Aquella mañana se vió vencida en la batalla, sin fuerza alguna para iniciar nuevas contiendas u ofensivas. Había intentado de todas las maneras imaginables que Sofía correspondiera a sus sentimientos con la misma fuerza con que ella le ofrecía los suyos, pero Sofía anhelaba el regreso de un amor perdido y suspiraba cada recuerdo, cada gesto, cada detalle, cada parte de la persona amada.
Y contra esa guerra de emociones, afectos, evocaciones, huellas... Andrea no podía seguir combatiendo, más aún , aquella mañana, destrozada de tantas heridas, cedió a la derrota y al llanto de un corazón que iba aniquilando con aquella tregua que decidió comenzar lejos, muy lejos de Sofía.
Ahora en aquel tren con destino a la más amarga de las soledades, los ojos evocados de Sofía la requerían y el dolor oprimía el alma con tal fuerza que se sintió desalmada cuando el vagón ya se movía por la marcha y ella no se bajó ignorando la compasión que esta le pedía.
Le había dejado una breve nota a Sofía:
- Me voy, sabrás de mí. No te preocupes - .
Cuando fuera capaz daría justificación a aquella huída. Ahora sólo podía poner distancia entre ella y su amor inalcanzable.
- Sofía, Sofía - El nombre rodaba en su mente.
¿ Y si a partir de ahora ella se convertía en una mujer incapaz de amar a otra que no fuera Sofía ?. La pregunta hizo que un estrecimiento la recorriera entera, golpeó violenta su reflejo en el cristal.

jueves, 27 de agosto de 2009

Los sentimientos cambian.


- ¿ Así de fácil, no? - preguntó Lorena cuando Ángeles terminó de decirle que ya no sentía de la misma forma por ella.
_Los sentimientos cambian _ se excusaba e intentaba explicarse Ángeles, _ No tengo yo la culpa de que los míos no sean ya lo que fueron.
- Ah, vale, la tengo yo. Yo tengo la culpa de que tus sentimientos llegados a un punto cambien de forma radical, porque pasó lo mismo con tu ex,¿no?.
_ No te metas con quien no puede defenderse_ Le gritó Ángeles.
- Es de tí de quien hablo y eres tú la que no puede defenderse, porque dime ¿ no es mucha casualidad que tus sentimientos caduquen siempre pasado equis tiempo, que casualmente no sobrepasa el año y medio ? -.
_ Los sentimientos son así, van cambiando. No son eternos. Van, vienen , nadie puede detenerlos o apresarlos. Lo que un día movió nuestro mundo, hoy nos deja indiferente.
y ¿ Qué puedo hacer ante eso, fingir ?. Todo pasa, no hay nada que dure siempre y el amor no es una excepción. También tiene su final. Yo no tengo la culpa, ocurre y ya está. ¿ Qué quieres que haga, acaso tú me vas a decir que tus sentimientos siguen idénticos, que no han variado un ápice del primer día, que sigues sintiendo por mí exactamente lo mismo ? _
- Exactamente el mismo huracán que me reducía en cada uno de los besos de tu boca - Sentenció Lorena.

Por Dios!!!!


Cómo pueden llamarle a "esto" Julia roberts??.

miércoles, 26 de agosto de 2009

Diez razones.

_ Dame diez razones para que vuelva a verte mañana_ le dijo Susana a Belén.

Primera : Desde que me vaya no habrá una hora en que deje de pensar en tí.

Segunda: En todas esas horas tendré la certeza de que sus minutos testimonian la razón primera.

Tercera: En cualquier segundo de cualquiera de esos minutos habrá un pretexto para llamarte.

Cuarta: A menos de una milésima de ese segundo conteneré las ganas de esa llamada.

Quinta: Para hacerte creer que no hay cinco razones ya.

Sexta: Estarás tal vez evaluándome mientras yo recurro a enviarte un sms para aliviar el ansia de saber de tí.

Séptima: Sonreirás al leerlo y será mi séptima razón.

Octava: En tanto me contestas el mensaje me pondrá histérica tu tardanza.

Novena: De las diez razones la nueve tendrá todo el peso de las ocho anteriores .

Décima: Y la diez podría multiplicarla por mil y podría añadir diez mil razones más a la número once que va de propina.

Undécima: Porque te quiero.



martes, 25 de agosto de 2009

Cartas y poemas.

Ocurría que ella faltaba mucho a clase y en mi entrega a aquel mi primer amor yo le escribía cartas en un cuaderno, donde le contaba casi enterita la clase... el comentario hecho por algún maestro al pasar la lista y comprobar de forma tan distinta a mí su ausencia... .
En ocasiones vuelvo la memoria atrás y la evoco entrando por la puerta con aquella especie de bandolera colgada al hombro y cantando. No siempre entraba cantando, pero así la recuerdo yo, tarareando aquella canción tan popular por aquel entonces de los que fueron los "Ricos y Pobres" títulada será porque te amo.
Yo hacia como que desvíaba la atención de aquella entrada, mas la seguía paso a paso hasta su pupitre. Ese era mi ritual todos los días; acompañarla sin que nadie lo supiera en ese breve trayecto.
Aquel cuaderno fue quien le delató a mi hermano que me gustaban las chicas. Recuerdo que yo lo tenía guardado en la mesa del televisor detrás de las cintas de vídeo y un día cuando bajé de mi habitación, ví que lo leí sentado en el comedor de la casa. Quiero recordar que no le dije nada y que él al verme lo guardó apresuradamente aunque no puedo acordarme con seguridad. Lo cierto es que desde aquel día empezó a decirme cuando me veía en la calle
_ ¿ Esperando a tu novia ? _ .
Hoy me gustaría leer esas cartas, mirar mi letra, tan distinta a la de hoy, vislumbrar ese corazón pillado entre las dos caras del amor , considerar el tiempo pasado... pero no sé qué fue de ellas, me parece que las rompí cuando años después ella se casó y yo decidí que debía descargar el alma y mis cajones de tanto amor por ella.
Las cartas dieron un día paso a los poemas. El primero que le escribí se lo envié por correo (cosa que nunca ocurrió con las cartas ) y ella creyó que se lo dedicaba un chico que le gustaba, creo que la decepcioné cuando le dije que era mío y luego, nunca más supo de otro verso que yo le dedicara.
Me empujó hoy la memoria a rememorar aquella época y pensé qué le escribiría hoy tras ese coloso de horas franqueado y sonreí porque caí en la cuenta de que tengo que mandarle un sms diciéndole que no me ha traído el trozo de tarta a los tres chocolates que me dijo ayer me iba a traer.
Y es que no es ella mucho de cartas, cosas que yo no sabía por aquellos años.






Reflexión.

Serás tú quien rompa mi llanto en incontables sonrisas.

lunes, 24 de agosto de 2009





No, nada llega tarde, porque todas las cosas
tienen su tiempo justo, como el trigo y las rosas;
sólo que, a diferencia de la espiga y la flor,
cualquier tiempo es el tiempo de que llegue el amor.
No,el Amor no llega tarde. Tu corazón y el mío
saben secretamente que no hay amor tardío.
Amor, a cualquier hora, cuando toca a una puerta,
la toca desde adentro, porque ya estaba abierta.
Y hay un amor valiente y hay un amor cobarde,
pero, de cualquier modo, ninguno llega tarde.
( Jose Ángel Buesa )

Yolanda.

Tras la nebulosa de esta, a veces perdida, esperanza, Yolanda es ante todo un sueño hecho realidad.
A mí que hasta ahora ninguno se me ha cumplido, pero que no dudo que se realizan, aunque en cantidad muy menor a la que debiera estipularse en la llegada a esta vida, no soñarla me deja desnuda de ilusiones.
Si Yolanda me sonríe, cómplice de la luna como es ella, contengo el universo en esta mano que escribe y rubrico el ofrecimiento de mi tiempo.
Ella es una ventana que se abre al futuro por donde desaparezco y coincide todo lo bueno que ella en mí despierta.
Si deja de mirarme es todo un laberinto del que no encuentro salida si ella no vuelve sus ojos para guiarme.
Tras esta imaginación incansable de saberla en algún lugar Yolanda es el principio y es el soplo de ternura regalado en la tarde.
Y pese a que detesta mi mal genio y suele reprocharme mis largos silencios con el resto del mundo me dice que es feliz conmigo.
Ella no pretende hacerme distinta, sin embargo la descubro a veces contándole a su madre que no tengo remedio.
Tiene la habilidad de verme entre líneas. Inspira el poema, el encuentro y la ocasión.
Ella es la cicatriz que dejó en el alma tantos momentos sin ella.
Es el deseo que desea, que anhela , que alucina. La risa recién estrenada y el llanto dulce de sentirla mía.
Yolanda es un temblor de mis labios, réplica de un corazón que tiembla.
Cuando en las noches sin luz me amparo en su recuerdo Yolanda es la inmortalidad de un suspiro.
Ella es una canción que silba el viento....
... "Miro tu cara y digo en la ventana
Yolanda, Yolanda
ETERNAMENTE Yolanda".

viernes, 21 de agosto de 2009

Un poquito de humor.


Dentro de quince minutos.

Miró el reloj, las ocho menos cuarto, dentro de quince minutos llegaría Erika sonriendo como siempre y al igual que siempre contagiado y al son de esa alegría el corazón de Inma le bailaría feliz de concretar en Erika la felicidad y saberla suya.
Se asomó por la ventana para distraer la espera. La tarde se había cerrado por oscuras nubes que amenazaban tormenta, la calle aparecía desierta y un tañido de campanas rompía el silencio tocando a duelo.
Vió aparecer un coche, blanco concretamente, no entendía mucho de marcas de coches pero le pareció un Ibiza. Concetró toda su visión en él, cuando creyó ver que Erika besaba en la boca a otra mujer que ocupaba el asiento de conductor de aquel vehículo.
Efectivamente era un beso en los labios. Se ocultó tras los visillos para ver sin ser vista. El beso parecía no ser de despedida pues Erika no bajaba del coche. Un beso siguió a una caricia que llevó a su vez a otro beso, otro y otro más.
Inma sentía el desasosiego de su corazón traicionado y un fallo en las piernas que le hacían casi imposible sostenerse en pié. Rebuscó en el último resquicio de sus entrañas un poco de fuerza y valor, algo que le costó encontrar porque sólo quería llorar.
Se dió cuenta que era insuficente la valentía que había adquirido cuando comprobó que esta se le desmayaba en cada centrímetro que acortaba la distancia hasta el coche.
Al llegar al Ibiza blanco golpeó en los cristales. Las dos mujeres parecieron no sorprenderse, pausadamente Erika salió del automóvil.
_ Lo siento, no supe de otra forma para que te enteraras _ .
Oir aquellas palabras hizo que al fin Inma soltara lágrimas que se empeñaba aún en retener y fue a la vez como un resorte que elevó su mano cruzando con una bofetada la cara de Erika.
_ No supiste de una forma más cobarde... _
No pudo seguir, su voz se ahogó en el llanto que a esas alturas sus lágrimas habían propiciado.
Se dió la vuelta lo más rápido que pudo para alejarse de allí y en su huida cruzó en rojo por un paso de peatones por donde pasaba un cohe también rojo que se la llevó por delante.
Intentó abrir los ojos, unas figuras difusas la rodeaban, no podía respirar, intentó levantar un brazo para determinar si era sangre lo que manaba por su cara.
_ Inma, Inma... _ Oía muy lejana la voz de Erika.
Y en un último esfuerzo como si adivinase que no habría otro momento siguiente a ese, balbuceó en un tono inaudible
_ No supiste de una forma más cobarde ... _
Y esta vez la frase tampoco pudo ser acabada.

Motivos para una muerte preparada.

Señores policías, médicos forenses, familiares, amigos y todos aquellos que de una manera u otra quieran saber los motivos de esta muerte.

Hacia meses que yo sospechaba que las cosas entre nosotras no iban como debían de ir.

La mujer que es mi compañera sentimental, mi pareja, novia o como quiera que califiquen nuestra relación los informes, atestados o medios de comunicación salía todas las noches, sin excepción alguna, volviendo a altas horas de la madrugada para dejarse caer luego indiferente al otro lado de la cama.

Supongo que eso no es razón para acabar con una vida. Pero añado el total desinterés a cualquier afecto dentro y fuera del dormitorio que compartíamos.

Llamadas constantes que recibía y a las que atendía siempre en una habitación distinta de la que yo estuviera.

Doscientos mensajes al móvil cada día, con un intervalo de dos minutos a lo sumo entre uno y otro.

Si esto les sigue pareciendo insuficiente agrego dos camisas con manchas de barra de labios ( que no es el que ella usa ) y que pueden comprobar en el lado derecho del armario, que es donde se guarda su ropa. La mía está en el izquierdo. Por aquello de ciertas ideologías políticas cuando me dan elegir opto por el lado izquierdo, aparte de por lo dicho anteriormente, por ser el lado más cercano al corazón. Esto ya sé que no viene al caso, pero creo que lo de saber dónde pueden encontrar mi ropa, sí, por si hayan algo que les ayude a calibrar mi mente, porque en ese mismo lado del armario y detrás de la ropa hay un doble fondo donde guardo muchas cosas personales que quizás les vaya guiando sobre mi personalidad.

Las pruebas que aquí expongo... bueno, supongo que hasta la irrefutable que ahora contaré serán a sus ojos inviables para cometer tal acto. Pero supongo que esto es lo que se podría llamar una locura de amor, aunque con el agravante de premeditación y sin alevosía, puesto que hasta el mínimo detalle ha sido concienzudamente pensado durante estos últimos días, ( ya ven hasta esto de dejar constancia de la causa, no son muchos los que dejan testimonio ante un acto así. Facilita mucho las pesquisas, ¿ verdad ? ) .

Bueno... que me descentro de lo importante. La evidencia que no admite discusión, al menos para mí y menos en esos momentos en que la mentira en la que yo basaba un amor idealizado se condensa cuando en esta misma sala en la que yace el cadáver , sorprendí a la que yo suponía mi GRAN AMOR humillando mi persona, mis sentimientos, mi cama, mi casa con otra mujer. Para que nos entendamos y no dar lugar a especulaciones, sincera y llanamente digamos que la encontré poniéndome los cuernos con otra mujer, y lo digo así por lo que he dicho de que no surja ninguna especulación, pues personalmente me dá como grima esa expresión (incluso antes de sentirla en mis propias carnes) . Es algo tan terrible y doloroso que esa frase, casi cómica, jamás podrá abarcar sus sensaciones .

Si los arriba mencionados jamás lo han sufrido , aparte de desearles que ojalá nunca pasen por ello, les diré que es un estado... no sé.... imaginen introducir en una termomix dolor, humillación, angustia, rabia,impotencia, miedo, tristeza, desolación , llanto. Pues la mezcla de todo eso es el estado que sobreviene pasado ya el efecto sorpresa de la verificación.

En todo ese batiburrillo de emociones me encontraba yo, cuando poco a poco se fue gestando en mí la idea.

Y es por eso que tras una llamada hecha por mí han acudido todos ustedes a mi casa y han encontrado ya este cuerpo sin vida. Se preguntarán cuánto debí de amarla si fuí capaz de cometer tal acción, les respondo que mucho. Tanto, que tras ser consciente de que no podía perdonarla pero que a la vez mi vida sin ella era una muerte lenta, clavé ( a estas alturas supongo que certeramente ) un cuchillo en todo el centro de este corazón que espero me produzca una muerte instantánea , que acabe ya con este sufrimiento de no tenerla.

Gracias por la atención puesta en estas letras.

Pd: Ruego encarecidamente no se haga saber nada de lo acontecido a ella. Está pasando sus vacaciones en la Riviera Maya ( con la otra ) .

jueves, 20 de agosto de 2009

Casi 4 minutos para el recuerdo.

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Clara: Por eso estoy triste y sin ilusiones. Puedo comprarme el mundo, pero eso no me hará ilusión.
Yolanda: No va a tener nunca la queja de que dejé de esperarla. Eso no podrá echarmelo en cara. Y cuando la tuya aparezca le diré que no la mereces porque perdiste totalmente la confianza en el encuentro, que lo sepas.
Clara: No aparecérá, así de sencillo. No tendré que dar explicaciones a nadie.
Yolanda: Ahora no puedo resistirme a decir mi frase favorita: Quién sabe!.
Clara: ¿ Quién sabe ?. Te repito, yo lo sé.

Veinte años después.

Había vuelto al pueblo después de veinte años. Muy distinto el norte del sur a su parecer.
Al pasar cerca de la casa de la que había sido su gran amor, Andrea sintió un escalofrío que volvía de otro tiempo.
La casa, con el número 9, vendida tras la muerte del padre a unos ingleses, a pesar del tiempo se veía igual, y se vió siendo aún una niña a las ocho de la mañana, llevando un pastel recien traído , porque Marta le había dicho la noche antes que se lo llevara en cuanto el vendedor lo dejase en la tienda de sus padres y la vergüenza que pasó cuando tuvo que decirle a esas horas de la mañana a la madre de Marta que traía el dulce a su hija.
Más recuerdos revivieron aquel día, incluso hubo algunos que pareciendo ya olvidados se mostraron meláncolicos sorprendiendo a Andrea.
Después de veinte años seguían idénticos de emociones y ella no sabía si reirlos o llorarlos y optó por lo primero, esbozando una amplia sonrisa, al fin y al cabo y a pesar de ser un amor no correspondido, veinte años después se sentía feliz de haber amado de aquella manera.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Una flor.


En todo el tiempo que estuvimos juntas en ningún momento te envíé una flor. Ahora, quizá tarde, te mando esta con la esperanza puesta en que un día pueda reconquistarte.
Sé que es absurdo que sea yo, que fuí la que te dejó, la que hoy quiera recuperar tu amor.
¿ Es eso posible ?. ¿ O aquella tarde cuando te dejé frente a tu casa tras haberte dicho que no podía seguir contigo, se cerró de golpe tu corazón para mí como cerraste la puerta de mi coche?.
Llevo días, semanas intentando hacerte ver que todo fue un error, que no sé ni cómo pensé que ya no te quería cuando en absoluto lo sentía.
¿ Recuerdas que te dije que si alguna vez tenía otra novia querría que fueras tú ?.
¿ Cómo interpretaste entonces esa estúpida contradicción?.
Ahí me delató el subconsciente , seguro, pero yo no supe verlo en ese momento.
En todo el tiempo que estuvimos juntas, ninguna vez te envíé una flor. Por eso hoy, con la tristeza de tantos detalles pasados por alto, quiero que aceptes esta rosa.
Mi idea era comprarla roja para que expresara todo el amor y la pasión que nunca ha desaparecido en mí. Pero sé que tú la, prefieres blanca, asi que esta de tu color favorito imagina que su color original era intensamente rojo y que quedó así por todas las lágrimas que derramé en ella llorando tu ausencia.

Vacío de lógica.

Rosa no esperaba aquella reacción en Raúl, le pilló tan de sorpresa que tuvo que ir desmenuzando cada palabra para poder asimilar la frase.
Llevaban cinco años de matrimonio y en los últimos meses la desconcertaba sueños jamás antes soñados.
Se despertaba de ellos con una desazón y una angustia que la mantenían ya durante el resto de la noche en una inquietante duermevela que ni la respiración serena de Raúl durmiendo a su lado conseguía aplacar.
Aquel día se armó de valor y tras dejar encima de la mesa la dorada a la sal que hacia las veces de segundo plato en aquel almuerzo, Rosa dijo con una voz que apenas reconoció como suya
- Raúl no puedo seguir contigo -.
Después de decir aquello, de argumentar motivos y por qués fué cuando salió de la boca de Raúl esa frase indigerible, vacía de lógica, sin sentido...
- Queda con todas las mujeres que quieras, pero no me dejes -.

martes, 18 de agosto de 2009

Deberiamos usar el pasado como trampolín y no como sofá.
( Harold Macmillan )

Libro de ida y vuelta.

Silvia sacó el libro de la maleta; La mujer justa de Sándor Márai. Le quitó el sobre de papel con el cual lo habían envuelto en la Fnac cuando lo compró.
Parecía intuir antes del viaje que no haría falta que aquel libro viajara con ella, pero quizá por no creer del todo que no habría tiempo ni para un café, el libro había viajado también. Y allí estaba, también, de regreso con ella.
- No tenía que haberlo comprado tan pronto. En fin, lo leeré en mi subir y bajar escaleras, cuando termine la mano de Fátima - se dijo.
Se puso a ojearlo, lo abrió por la página tres, tal vez por el simbolismo del número. En esa página sólo aparecía escrito : Primera parte.
Oficialmente la historia empezaba en la número nueve. Silvia la leyó completa y afirmó - Ciertamente los seres humanos podemos llegar a ser muy tontos -.
Colocó el libro en la estanteria. Ocupó el segundo vasar, al lado de la casa del Indiano.



lunes, 17 de agosto de 2009

Hagan caso.


Otra luz dentro de ella.


Se levantó para llevar su plato al fregadero y al encender la luz de la cocina fue como si a su vez se encendiese otra luz dentro de ella.
Comprendió de inmediato que eso no tenía nada que ver con el amor. Aquellos gritos e insultos que había arrojado Luisa una vez más sobre ella, no cabían dentro de los significados ni de los sinónimos del amor.
Al fin se daba cuenta y no los eximía tras un mal día, un bajón pasajero o un exceso de trabajo.
Dejó el plato y se dirigió a la habitación que ambas compartían. Luisa entró poco después y la vió sacar del altillo del armario una maleta
- ¿ Qué se supone que haces ? - vociferó.
- Mandarte a la mierda - respondió tranquila Nora.
La idea más bonita, quizá por ser la más optimista, la más ilusa también, la más llena de sueños y de fantasías, es que cuando deseas algo con todas tus fuerzas y haces todo lo que está en tu mano por conseguirlo, las energías del Universo se conciertan en una especie de alianza que fluye naturalmente a través de los seres del planeta que vas encontrando en el camino y,juntas, hacen que los sueños se cumplan.
( Del libro las nueve revelaciones. Dedicado a May )
El Jueves me preguntaron en el chat cuál era el regalo que había recibido en mi vida "amorosa" que más me hubiese sorprendido, emocionado... Se me vino enseguida a la mente una bicicleta estática que me regaló mi primer amor, pero advertí que este había perdido potencial porque la ví entrarla en su casa y porque ella no era nada discreta.
Así que pensé en la película Pretty Woman que me regaló mi ex. Pero un tanto de lo mismo, fue un regalo con muchas señales anticipadas que presagiaban su llegada.
Entonces repensé en trece piedras que otra ex guardaba como amuleto, pero nuevamente lo deseché porque como los anteriores me habían emocionado mas su obsequio fue en cierta manera también anticipado, asi que carecía igualmente del factor sorpresa.
Asi que futuros amoressssss:
-Chiiiisssssssss ni media palabra que delate, ¿ eh ?.

Que pasen las musas que ya estoy de vuelta.