A tiempo.

A mi tiempo no se le dio bien esperarme. Cuando yo quise pasito lento, tiraba de mí. O me estorbaba el paso cuando yo quería correr los años a la velocidad de la luz. Pienso que los dos nos soportamos penosamente..

A veces el tiempo parece detenido en un cuaderno y lo creemos constante, sin embargo la a de aquel amor se trastorna con cuatrocientas horas y un segundo de olvido y confunde el ciclo de las estaciones que no se detuvieron. Y las palabras reforman o invierten su significado a causa de la metamorfosis del sentimiento.

Hay un espacio vacío entre lo que fue y lo que no ha sido, ese punto desconocido, al que no es posible darle oportunidad.¿En qué momento se muere el beso que se precipita en ese vacío?.Quizás el destiempo sea quien empuja los instantes que no tienen existencia.

Y detener el tiempo... ¿ En qué ocasión ?, ¿ Con cuál circunstancia ?. Un intervalo entre el pestañeo del día y la noche, ante el anhelo, con la duración exacta para llegar a tiempo.

Nubosidad Variable.

... La cuestión ahora es llenar este cuaderno de limpio para poder regalárselo el día que la vuelva a ver. "Mira, te he traido de regalo un cuaderno con deberes,¿te gusta?" No sé qué dirá ni dónde estaremos ni qué cara pondrá ella. Me basta con imaginármelo. Es un móvil suficiente. Me basta con estar segura de que voy a volver a verla.
Antes de la exposición de Gregorio Termes, la idea de volver a ver a Mariana era una esperanza abstracta,como una flor marchita a la que se le ha desvirtuado el olor. Ahora no. Ahora vivo la espera apaciblemente, arrullada por el ruidito de la pluma estilográfica al correr sobre las hojas satinadas.
Vivir la espera. Era la retórica imperante en nuestra juventud. Poner los cimientos de un deseo y alimentarlo para que dure.
Parecía que la felicidad se iba a desvanecer entre los dedos en cuanto la tocáramos. Yo he deseado pocas veces con la fuerza con que deseo en este momento volver a ver a Mariana, donde sea, cuando sea ( sé que va a pasar ), y poderle decir: "Mira, te he traído de regalo este cuaderno", así que me gozo en irlo llenando despacio, esmerándome en la letra. Eso es como estar ya con ella también ahora según lo escribo, un anticipo de felicidad que conjura la muerte del tiempo...

************************ ********************************** ****************************

... Tengo la ventana de par en par y la luna está en cuarto menguante. Asómate, Sofía,mira la luna. Tienes que notar ahora mismo cuánto te necesito y cuánto me importa que estés ahí esperando mi carta, la luna te dará el recado como sea. Mariana te está escribiendo, quieta, ¿ no lo notas?. Te va a llegar un cuento largo, sí. Y podrías estarla mirando, siempre fuiste viciosa de la luna y de las historias que se inventan o se recuerdan bajo sus efectos narcóticos...

( Carmen Martín Gaite. Nubosidad variable )

Realidades Soñadas.

Desde una casa deshabitada;
(paredes desnudas y sábanas desarropadas).

Un reloj en cualquier mesa
impetuoso de horas
y un calendario de ficción
que señala el fin del sueño.

Desde aquí despunta el día
mientras la noche aún danza
sobre los perfiles de los deseos
y es posible coincidir todavía
con la madrugada de la alegría y de la luz.
Y oir el empeño del viento
en abrir las ventanas que dan al mar.

Desde esta casa que parecía derrumbarse
de humedades y soledades
resurgen las risas perdidas
y reverdece el campo por culpa
del llanto de la felicidad
que es el único que sabe
pintarme de verde el alma.

Desde aquí, donde coexisten pasado y futuro
a fuerza de amar en presente
quiero fotografiar la luna llena
que encenderá mi cielo.
Porque es creible, desde aquí,
andar el camino y tener la llave.
Y hasta escuchar a los perros
que me vienen alcanzando.

Desde una casa deshabitada;
( de paredes desnudas y...)
Yo, ¿despierto o
sigo soñando ?.

Mi trozo de cielo. Rosana .

Emplazamiento.

Tranquila no voy hoy a volver a las andadas de repetirme en palabras.
Sabes que a veces me dan ganas de borrarlas todas?.
Pienso muchas veces que quizás este no es el lugar ( ni quizás el momento )de caligrafiar el corazón ni publicar la visión del mundo al que me aferro.
Mencionar algo aquí ( para ti ) qué sentido tiene?.
Sí,puede ser que hoy me levanté con el pie inapropiado,que cabeceen las ganas por falta de sueño o que no tenga más valor para buscar una imagen que pretendo y que se me extravía en el nombre que no tienes.
Me gustaría encontrar la manera de anestesiar los versos. La narcosis profunda que sea capaz de no sucumbir a la soledad, a la impaciencia ni a la imbecilidad infinita de esta que te escribe.
De momento voy a poner la intención (ya iremos viendo resultados).
Te emplazo a otra poesía distinta, versada en los recodos de tu cuerpo.
Acontecida tras la noche que no te extraña.
Vestigio de la alegría que palpita y como yo, no quiere irse.

Desde el olvido.

Después de mucho tiempo la volví a ver. Yo estaba sentada en la terraza de un bar y pasó ella con la que supuse su novia. Me pareció verla llegar y miraba de reojo hasta que su mirada dejó de estar frente a la mía, pero era inconfundible su manera de andar y su forma de llevar la chaqueta sobre el brazo. A la que sí vi bien fue a la acompañante, que se percató de que yo miraba a mi ex.
Ha pasado el tiempo en una plaza desconocida que sigue siendo la misma.
Se nota en las distintas caras de los camareros. En los extraños que ocupaban las otras mesas. En el cambio de look, de compañía e indudablemente de directrices que marcan el nuevo guión.
Distintos actores en un mismo escenario. Y bajando el telón, el amor saludando desde el olvido.