martes, 20 de julio de 2010

Yo sé que mi vida
es el deseo infinito de encontrarme
cada noche en sus ojos.
De amanecer dibujando su boca.
Saber que el recuerdo de su beso
es el martirio de mis horas sin ella.
Yo sé que quiero pronunciar su nombre
y quemarme los labios.
Y escuchar su risa en la voz del viento.
Yo sé que mi vida
es esperar su encuentro,
Que este poema queda suyo
aunque jamás lo sepa,
y que también yo quedo,
eternamente suya.

6 comentarios:

Tanais dijo...

jo que bonito!!! xq no lo va a saber nunca? mmm

0 dijo...

Lindo!!!! Deberías enviarlo a la persona inspiradora =)
Beso!

brezo dijo...

qué bonito! bsts

Isabel Gil Jiménez dijo...

Dicen que nada es eterno. Creo que mienten.
Un saludo

Verónica dijo...

Precioso sentimiento y deseo que dure y dure mucho...

besotes de esta peke.

pd. te espero por mi rincon con tu taza de cafe, siempre que quieras...

alasdemariposa dijo...

Tanais, nunca se sabe.
M,quizá algún día lo haga.
Brezo,gracias. Cómo han ido esas vacaciones?.
Isabel, hay cosas que sí deberian serlas.
Peke,gracias.