sábado, 4 de febrero de 2017

La sonrisa que nadie más provoca.

Te la dejo aquí, 
junto a una noche de media luna,
entre cuadernos y hojas sueltas
a los que ha sido y será incapaz
de desprender o arrastrar cualquier viento impertinente que pudiera considerarlo.
Te digo que nada me cuesta dártela ,
 más que mía,
es tuya,
porque de provocarla e inspirarla sólo tú tienes
culpa.
como de cualquier beso que tenga sed de tu boca.
Te la dejo excenta de cualquier reembolso, caducidad o vencimiento. 
El tiempo no va a hacer que se pierda,
no tiene fuerza ni para borrar la línea más pequeña.
Te la dejo aquí,
ante,contra,entre todas las miserias
de un mundo que gira sin esperarnos. 
Yo, la dejo como regalo,circunstancia,promesa...
Tú, recogela cuando quieras.


No hay comentarios: