En el intermedio de un ataque de tos que no termina
pulverizada de codeína, yo la tuve aquí.
La reina del jardín de la fortuna
trovadora de la risa en ese claro de luna
que ilumina la noche y su rutina
de no poder dormir.
Bendita la locura de sentirla desnuda
partiendo en mil pedazos
las horas y sus atrasos
liquidando intereses
en el alma y en los brazos
de quien tanto apostó.
En esta ruleta de posible poca suerte
a la magia del siete
a la persistencia de tenerla
y a este premio de amor.
De retenerla desafiando los pronósticos
del tiempo sin razón
que la aleja en una tormenta
de nerviosos poemas de amor.
Porque con la somnolencia que se quiebra
en el último golpe de tos.
Se quebraron los espejos y cristales
que reflejaban su cuerpo
en los soportales de mi imaginación.
Y cortó sin remedio a la alegría y al corazón
y a los retales del sueño que remiendo
con esta canción.
Con hilo del color de sus ojos
que pudiera ser que adivinara yo
cuando sentenciaban a muerte
al alba y a la suerte
de ser quien pueda quererla
a la luz del sol ,de la realidad y de la gente.
Que dice que la esperanza
es lo último que se pierde
que quien sigue la consigue
y que llegará cuando menos la espere.
¿Bonitas utopías?
¿quién se las cree?.
Consecuencias de sus manos en mi espalda
y del sonido de su voz
que acuna en mis labios
el ahora,el siempre y el eco de un reloj.
De un maldito reloj que despierta la pesadilla
de que se va sin haber venido
de que sin haber venido se va
y queda a las cuatro de esta madrugada
el sabor fuerte del jarabe
combinado con unas gotitas de sal.
De unas lágrimas que no detienen su partida
ni entretienen a la mañana
que trepa hasta la ventana y me dice:
levántate del sofá
y yo no tengo ganas de comenzar
este día de diciembre
con esta camisa de soledad.
(Yo me metería en la cama convaleciente
de su ausencia y de mi pena de amor).
Mientras medito qué resultado tendrá
saltarme las promesas
de quererla con mis letras.
disfrazos estos versos de canción
e invento el ritmo;
sístoles y diástoles de un corazón.
y le pongo por título:
Esto no es una canción
es romper un pacto
por culpa de la paz bronquial
que promete este bote anti tos .
4 comentarios:
Estooooo y te gustaba mi poema...hija mía...ojalá tuviera yo toses tan creativas como la tuya!!
Paciencia...quizá no sea momento de batir las alas...
Un abrazo!
PD Lo malo de ir a la misma tienda es que nos hemos comprado una camisa de soledad igual :-(
Chris,pues a ver si se pasan pronto de moda ,no?.
Un abrazo.
yo tb tuve una reagudización de mi bronquitis, pero lo único que hice fue casi morirme :(
marga,yo voy a tener que ir al médico,porque esta no se quiere ir.
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