Registro mental.

Me levanté con el presentimiento, con la sospecha de que hoy tenía que hacer algo importante.

Pero por más que daba vueltas a mi cabeza no acertaba a descubrir qué cosa era.

Fue un registro mental completo y estéril.

Busqué en el móvil a ver si alguna nota o alguna alarma me daba al menos una pista de lo que pudiera tratarse. Mas la única alarma existente era esa inquieta premonición de que algo debía hacer y no lo estaba haciendo.

Revisé la cita con mi cardíologo, pero qué va, no tengo que verle hasta Febrero.

Comprobé si mi D.N.I estaba caducado. Si tenía cita con el veterinario para llevar a mi perra. Nada.

Nada de lo que creía posible que fuera lo era. Y a pesar de eso algo rondaba insistente por mi mente. Pero , por dios,

, ¿ qué era?.

Subí a la habitación con la esperanza de encontrar en mi cartera algún rastro de aquella inquietud. La abrí; ninguno de los papeles que contenía me ofrecía una puñetera señal. Lo único bueno fue que encontré diez euros que no creía tener en uno de sus compartimentos.

Ainsss, esto empezaba a exasperarme. Joer con la p_ ta pérdida de memoria!.

Relájate , me dije. Párate un poquito y piensa. Leñe, y casi se me seca el cerebro pensando y seguía sin acordarme!.

Me fuí a buscar a mi hermana y le pregunté que si sabía de algo que tuviera que hacer hoy que fuera ineludible, me contestó que no tenía ni idea, se te caduca hoy algún tikets de algo que quieres devolver?,me preguntó.

Y no. No tengo nada que quiera devolver ni descambiar.

Me cercioré, aunque estaba convencida de que no, de si tenía que renovar mi tarjeta de demandante de empleo.

¿ Y si de verdad era algo de vital importancia y se consumía este día sin llegar a acordarme?.

Volví a subir a mi habitación y registré uno por uno todos mis cajones y bolsos.

Nada.

Cogí una silla para alcanzar la caja que tengo encima del armario.

Menos aún.

Hice lo mismo en la habitación de mi hermana, con la velocidad del rayo, para que no me pillara fisgando sus cosas.

Muerta de cansancio y de impotencia me senté en mi cama. No me bastó y decidí tenderme y al ir a poner la cabeza sobre la almohada, clic!, se hizo la luz!!!.

Algo dentro de mí se encendió desvelando las sombras de aquella incógnita.

Bravo!, estupendo!!. Ya sabía qué cosa tenía que hacer que no admitía más demora!!!!.

Y es que todas estas letras vienen a ser los preliminares, el prólogo concebido e inventado para que no fuera la primera frase de este escrito esta que lo cierra:

Feliz cumpleaños!!!!!