Una carta?

Una carta?
Y qué te digo en ella que tú no sepas?.
Podría decirte que anoche tembló
de frío la luna
al filo de tu ausencia.
Pero eso tú ya lo sabes.
Cesión de horas lentas me concede la noche
para esta sesión de sueños
que no acaba.
Extravío de mi mirada en un punto fijo
donde tú no estabas.

Una carta?
Y qué te cuento que tú ignores?.
Podría enumerarte los pensamientos
cosidos, remendados, hilvanados, recosidos
que sujetan las costuras de mi alma.
Pero eso tú ya lo sabes.
Amputar el desánimo de una madrugada
distante de tu boca,
donde un gélido presentimiento
surca una lluvia de estrellas
y por una vez, no pido nada.
Mutilar la derrota de saberte inmutable
en este mundo sin mí.
Abandonar el desmayo de intuirte
perdida, hallada ya en otra.

Una carta?
Y cuándo vas a leerla?
Cuándo vas a contestar a este remite de deseos?
Cuándo vas a decirme; es este, mi vida,
el momento en que se estrenan los besos?.
Podrías declarar el tiempo de la felicidad
con sólo una sonrisa.
Podrías anunciar, enunciar, recitar, expresar, clamar...
que comienza la obra del amor
y que somos protagonistas tú y yo.

Una carta?
Documentada de nuevo en la extrañeza de tu cuerpo?
Apuntada por un corazón tendido
a la sombra de tus ojos?
Sellada de fantasías y delirios?
Firmada en este día y a esta hora
cuando cruza de nuevo
la noche por la casa
y yo suspiro bajito
y tú ya lo sabes?.