Porque pega fuerte y con la mano abierta,
deja la huella en la mejilla
apostando por despertar  tu  rabia o tu  impotencia.

Junio sabe muchas cosas,
es  como un libro abierto,
subrayado en la última página.
Impetuoso exige atención
y desencadena tormenta sin lluvia,
de la que quieres guarecerte
al cobijo de cualquier ilusión
que conceda capacidad para estrenar sonrisas.

Porque no es tiempo de someterse a su delirio,
aunque descienda y proceda,
aunque perturbe y trastoque algunos días.
Que haga vibrar recuerdos
ya no puede ser catástrofe ni derrota.

Tañer  antiguas campanas..
pulsar teclas incorrectas...
Ya no produce efectos,
Porque él quiere ruido
y yo prefiero silencio.